¿Qué es la Micosis?
La micosis es el término médico para las infecciones causadas por hongos. Estos microorganismos pueden afectar la capa superficial de la piel, las uñas (onicomicosis) y el cuero cabelludo (tiña capitis). Son extremadamente comunes y no están necesariamente ligadas a una mala higiene; simplemente encuentran en ciertas condiciones de calor y humedad el ambiente ideal para proliferar.
Como dermatóloga, mi primer paso es identificar el tipo de hongo y la extensión de la infección para prescribir un tratamiento antifúngico certero, evitando que la infección se extienda o se vuelva recurrente.

Síntomas Comunes
Los signos de una micosis varían mucho según la zona del cuerpo afectada. Es clave reconocerlos para buscar tratamiento a tiempo:
- En la Piel (Tiñas):
- Manchas rojas, circulares, con bordes ligeramente elevados y escamosos.
- Picazón intensa en el área afectada.
- A veces, la parte central de la lesión puede verse más clara, dando un aspecto de "anillo".
- En las Uñas (Onicomicosis):
- Cambio de color, volviéndose amarillentas, marrones o blanquecinas.
- Engrosamiento y deformidad de la uña.
- Fragilidad, haciendo que la uña se quiebre o se deshaga fácilmente.
- Separación de la uña del lecho ungueal.
- En el Cuero Cabelludo (Tiña Capitis):
- Áreas de pérdida de cabello, a menudo circulares.
- Descamación, que puede confundirse con caspa severa.
- Puntos negros en el cuero cabelludo (pelos rotos a ras de piel).
- Inflamación y sensibilidad en la zona.
Posibles Tratamientos
El tratamiento de la micosis debe ser específico para el hongo causante y la localización de la infección. La constancia es la clave del éxito. Un tratamiento incompleto es la principal causa de recurrencia. En Dermaessence, establecemos un plan de acción claro y un seguimiento para asegurar la erradicación completa de la infección y te damos las pautas para prevenir futuros episodios.
- Tratamientos Tópicos Antifúngicos: Son la primera línea de tratamiento para micosis cutáneas leves y localizadas. Se presentan en forma de cremas, geles, polvos o lociones que se aplican directamente sobre la zona afectada. Para las uñas, existen lacas o esmaltes medicados.
- Tratamientos Orales Antifúngicos: Se reservan para infecciones más extensas, recurrentes o cuando afectan áreas de difícil acceso para los tópicos, como las uñas y el cuero cabelludo. Fármacos como la terbinafina o el itraconazol actúan desde dentro del organismo para eliminar la infección. Requieren siempre prescripción y supervisión médica.
- Champús Medicados: En casos de tiña capitis o pitiriasis versicolor en el tronco, los champús con componentes antifúngicos (como el ketoconazol o el sulfuro de selenio) son una parte fundamental del tratamiento, ya sea solos o en combinación con fármacos orales.
- Cuidados y Prevención: Parte del tratamiento es educar al paciente. Esto incluye mantener la piel limpia y seca, usar ropa de algodón transpirable, evitar compartir toallas u objetos personales y utilizar calzado adecuado para prevenir el pie de atleta.